Qué espero de la educación en 2030

Hi, everyone! En esta nueva entrada del blog trataremos un tema bastante particular y personal: cómo creo yo que será la educación en el año 2030. Bien, pues la verdad es que el 2030 no está tan lejos, si me hubieran preguntado por el 2080, o 2100, igual lo hubiera pensado más, pero vamos que dudo que haya muchas diferencias de lo que es la educación actual a lo que será la educación en el año 2030. 

Como seguramente, por desgracia, siga viva, y si todo me va bien, esté dando clase en un instituto, me gustaría que la educación como tal haya mejorado significativamente. En primer lugar, me gustaría que todo tipo de deberes, exámenes, y tareas de carácter memorístico hayan desaparecido. Considero que deberían ser obsoletos incluso hoy en día, pues como he mencionado reiteradas veces, me parece innecesario obligar a los estudiantes a aprender un temario extenso, sin sentido, para que lo escupan en el papel el día del examen y después lo olviden. A modo de propuesta, me gustaría que la educación en 2030 apostase por un modelo de evaluación más fresco e innovador en el que los estudiantes desarrollasen el pensamiento crítico. 

En segundo lugar, ojalá fuera posible que no acudiésemos al centro educativo de forma presencial. Estaría bien que pudiéramos tener hologramas, o alguna especie de robot que acudiera a la escuela por nosotros. Que tuviera cámaras en los ojos y nos pudiera transmitir en tiempo real lo que está pasando en el aula. Esto, obviamente, no va a pasar, pues creo que nos falta todavía mucho desarrollo en la tecnología para llegar a ese nivel y sobre todo para que sea accesible para todo el mundo. Recuerdo que la película Blade Runner,una película de los años ochenta, estaba ambientada en un futuro lejano, siendo este ni más ni menos que noviembre de 2019. La sociedad había cambiado mucho, androides e humanos convivían juntos, había coches voladores, todo era muy tecnológico, y la estética en sí era la de una distopía totalmente ambientada en el cyberpunk. Con esto quiero decir que imaginarme un mundo ideal donde la educación haya cambiado significativamente me cuesta. Pues los cambios se dan, pero requieren mucho tiempo, y sobre todo, paciencia.  

En último lugar, me gustaría decir que nada de esto pasará porque seguramente hayamos acabado con el planeta Tierra en 2030 porque al paso que vamos, dejando atrás la contaminación, seremos invadidos por vida alienígena proveniente de los miles de planetas que todavía no hemos descubierto en 2021. Además, los otakus se sublevarán para intentar dominar el mundo mediante el poder del amor y la amistad (aprendido de Naruto) con su líder Samuel L. Jackson al frente, que estará vivo gracias a un corazón artificial. Estos harán el conocido Naruto run mientras cantan grandes himnos de su época como el opening de Shingeki no Kyojin, o el de Tokyo Ghoul. Finalmente la revolución otaku triunfará cuando no quede agua en el planeta y todos acabemos oliendo a sobaquillo eternamente. Así comenzará una nueva y oscura era... 

                                                            El llamado Naruto run

                                    Samuel L. Jackson demostrando ser el líder de los otakus

                                   

                                   Si has llegado hasta aquí,¡muchas gracias por leerme!